jueves, 30 de junio de 2011

ÚLTIMAS LECTURAS DEL MES



Últimas lecturas:

Miguel Syjuco (Ilustrado)
Este joven escritor de origen filipino ha escrito una primera obra que ha recibido tan buenas críticas que me he sentido obligado a leerla. Como me ha gustado su trabajo espero que al autor no lo crucifiquen algún día (nunca se sabe con tanto crítico literario y tanto envidioso escritor pululando por el mundo), y que no aparezca su cuerpo arrastrado por el agua como si fuera un pelele, igual que le sucedió all escritor exiliado de renombre que figura como personaje principal del libro, o espera, no sería al joven narrador del libro, un tal Miguel Syjuco, que pretendía escribir la biografía de ese ilustre escritor e ir en busca del manuscrito final de su maestro. No lo sé, leed el libro que no pretendo desvelar ningún misterio.




Ray Loriga (Tokio ya no nos quiere)
Lectura original e inquietante. Mucho sexo, muchas drogas y mucha soledad en ese mundo lleno de "replicantes" que ha creado Loriga. ¿Si perdemos la memoria dejamos de sufrir?


Alfonso Zapico (Dublinés)
Biografía ilustrada de James Joyce. Imprescindible su lectura, sobre todo en este mes, ya que se ha celebrado el 16 de Junio el Bloomsday en honor a Leopold Bloom, personaje principal del Ulises. Muy humano este Joyce, que aparece descrito como un mujeriego, borrachín y sableador. No me extraña que aparezcan en sus libros esos personajes tan vividores, que se comen la vida con gran intensidad.



Último evento:



Azkena Rock Festival
Me gustó mucho el directo de los grupos Kyuss lives y Brian Setzer. Para mí fue lo mejor de esta edición del Azkena Rock Festival, junto con el buen ambiente que se respira en todo el recinto. Es curioso, se forma de la noche a la mañana una pequeña comunidad de personas, casi todas vestidas con sus camisetas negra, con la única finalidad de pasárselo bien asistiendo a los conciertos de sus músicos preferidos. Que no te gusta un concierto de los muchos que se programan, pues toca acodarse en el bar y tomarse una cerveza con los amigos.

lunes, 20 de junio de 2011

EL SUR DE VÍCTOR ERICE


Trasteando por internet he encontrado esta entrevista que le hicieron a Víctor Erice en el programa Versión Española. El director habla sobre el proyecto original de la película EL SUR, que rodó hace ya tanto tiempo, y que él considera una obra inacabada. Es una pena que directores de esta calidad, y que no son nada comerciales, no puedan tener una continuidad en la industria del cine. Viendo el entusiasmo con que Víctor Erice explica cómo iba a ser esa continuación del rodaje, por una parte, da pena que no podamos visionar el proyecto final, y por otra, siento envidia al ver cómo el director, totalmente volcado en su trabajo, todavía se emocionar al hablar de su proyecto aunque se lo cortaran por motivos económicos.

jueves, 16 de junio de 2011

BUSCO UNA OBSESIÓN QUE ME CONVENGA


Desde hace unos días aparece en mi blog un enlace a bubok porque me he autopublicado en esta editorial online un libro de poesía titulado "Busco una obsesión que me convenga". Como ha sido mi primera experiencia con la autopublicación, hasta que no recibiera el libro en mi casa no quería dar más publicidad al asunto ya que quería comprobar el acabado final del libro. Me imaginaba la posibilidad, aunque fuera remota, de que la edición del libro resultara ser una chapuza y que no tuviera un mínimo de calidad para que la gente interesada pudiera comprar el libro. Por eso, ahora que lo he recibido, y he comprobado que puede presentarse perfectamente en sociedad, escribo esta entrada en el blog para aconsejaros la compra del libro al precio de coste con que ha sido valorado. También existe la posibilidad de bajárselo gratuitamente como libro electrónico, y si os gustan los poemas que he escrito, animaos más tarde a comprar la edición en papel. Pues nada, que espero que os guste el contenido, ya que el continente está a la altura de las circunstancias.

miércoles, 15 de junio de 2011

MARCHA DE MONTAÑA KAMPEZO


Este domingo hemos participado en una marcha de montaña en Kampezo. Han sido veinte kilómetros, unas cinco horas de caminata cuesta arriba y cuesta abajo. A las ocho de la mañana se ha dado la salida y los ciento setenta participantes hemos salido "escopeteados" como si fuera una carrera de montaña. A los pocos kilómetros ascendíamos por un empinado barranco que nos obligaba a todos a circular en fila india. Cuando menos te lo esperabas se formaban tapones humanos en zonas un poco más técnicas, para desesperación de los que andábamos por detrás. Se ve que el miedo es libre. Una vez superadas estas zonas, y con todo el ancho del camino para transitar, toca "apretar el culo" para intentar recuperar el tiempo perdido en los atascos. Pasan los kilómetros, subimos a las primeras cimas programadas, y la gente ya circula a su ritmo en pequeños grupos. El desnivel acumulado hasta ese momento provoca que empecemos a sentir el cansancio en las piernas, a notar de vez en cuando que la respiración se vuelve más fatigosa cuando se encara la dura pendiente. Pero también da tiempo a que podamos admirar el paisaje que se observa desde la cumbre del Joar, desde las cimas más emblemáticas de la geografía alavesa como el Gorbea o el Aratz, hasta las sierras más cercanas de Codés o los montes de Izki. En el descenso del Yoar la organización ha situado el primer avituallamiento. Reponemos las fuerzas con un poco de jamón y queso, fruta y bollería variada, mientras esperamos al resto de nuestro grupo de amigos. Estamos en la mitad del recorrido y ya sólo nos queda subir a La Plana y a La Cogolla para "comernos" todo el desnivel de subida que nos falta. Subimos, descedemos, llaneamos pero no paramos de mover las piernas. Entretanto caen algunas gotas de agua inesperadamente que nos obligan a aligerar el paso. Ya en continuo terreno de descenso y después de subir a La Cogolla por un sendero al parecer recién desbrozado, nos encontramos ante una bifurcación de caminos. A la izquierda, un letrero nos indica un camino fácil, a la derecha un sendero para intrépidos. ¿Cuál elegimos seguir? Como cabras destrepamos por un sendero resbaladizo agarrados a la vegetación para no caernos de culo. La senda para intrépidos acaba en una pista que en pocos minutos nos conduce hasta la ermita de Ibernalo en donde la organización ha preparado el último avituallamiento. Sentados nos zampamos un buen almuerzo-comida a base de chori-panes, morcilla de Kampezo, tortilla de patatas, queso, etc, etc. La marcha de montaña bien puede decirse que acaba en Ibernalo, porque de allí al pueblo sólo hay un paseo de diez minutos que nosotros no llegamos a completar al quedarnos a tomar una cerveza en la casa de unos amigos. Saboreando nuestra cerveza bien fresca damos por finalizada nuestra participación en la marcha de montaña. Hoy, dos días después, tengo todavía las piernas agarrotadas y con agujetas.